¿Qué lugar ocupan los feminismos frente a las nuevas derechas a nivel mundial?

Internacionalismo feminista y antifascismo son los ejes del podcast producido por Clacso, que cuenta con la participación de Ana Cacopardo, Cristina Fallarás y Karina Batthyány.

La periodista y activista feminista española Cristina Fallarás conversa junto a Karina Batthyány, directora ejecutiva de Clacso. Créditos: Clacso.
La periodista y activista feminista española Cristina Fallarás conversa junto a Karina Batthyány, directora ejecutiva de Clacso. Créditos: Clacso.

El Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso) estrenó un nuevo episodio del podcast ‘Los monstruos andan sueltos’ para reflexionar sobre el rol de los feminismos en el contexto de las ultraderechas, marcado por discursos y políticas regresivas en torno a las mujeres y las disidencias sexuales. Con la narración de Ana Cacopardo –quien también es la creadora del contenido–, la periodista y activista feminista española Cristina Fallarás conversa junto a Karina Batthyány, directora ejecutiva de Clacso, acerca del internacionalismo feminista, el antifascismo y los modelos alternativos de masculinidad. El episodio ya se encuentra disponible tanto en Spotify como en las plataformas del Consejo y de elDiario.Ar, quien también participa en la producción.

“‘Los monstruos andan sueltos’ es un intento de pensar las condiciones sociales que son el fermento de las ultraderechas en general, y del mileísmo y la experiencia de La Libertad Avanza en particular. Este intento implica pensar no tanto en los palacios de gobierno, sino en la sociedad que habitamos. Cada episodio articula voces de intelectuales, activistas e investigadores con un encuadre específico, y es una herramienta para pensar un tiempo habitado por la incertidumbre y el desconcierto, una suerte de capitalismo del fin”, cuenta Cacopardo, en diálogo con la Agencia de Noticias Científicas de la Universidad Nacional de Quilmes.

En El 8M del internacionalismo antifascista, Batthyány y Fallarás dialogan sobre el contexto actual, marcado por la radicalización global de los discursos racistas, antifeministas y transfóbicos, la ultraderecha nacionalista en España, la masculinización de la política institucional, el intento de silenciamiento de las voces públicas feministas y el fracaso de los progresismos proponer modelos alternativos de masculinidad para los varones jóvenes.

El internacionalismo feminista es la única fuerza política, universal y solidaria capaz de plantar cara efectivamente al neofascismo, no hay ninguna otra fuerza articulada globalmente. El neofascismo no es un movimiento nacional, estatal o local, sino que es global y se mueve de forma global. Solo un movimiento global, articulado de forma solidaria y que sea universal, es capaz de plantarle cara. Ese movimiento solo es el internacionalismo feminista y en este momento no existe otro en el mundo como este”, afirma Fallarás en el podcast.

Al mismo tiempo, la activista feminista advierte: “Tenemos que plantearnos desde dónde y cómo queremos plantarles cara, porque no vamos a tener a los compañeros al lado y esto es una cosa que nos tenemos que tatuar en el pecho”.

En el episodio, algunas de las preguntas que realiza Cacopardo tienen que ver con los retos que plantean la masculinización de la política institucional y el silenciamiento de las voces feministas. En este sentido, una de las cuestiones centrales está ligada a la cuestión de cómo salir de una agenda reactiva y volver a colocar una narrativa de transformación. “No sólo responder, que hay que hacerlo por supuesto, a los ataques de la derecha, sino cómo seguir impulsando esas propuestas transformadoras que caracterizan al feminismo. No tenemos que olvidarnos que el feminismo está interpelando centralmente el modelo capitalista actual. Tenemos que volver a construir una narrativa de la transformación y en ese marco es clave colocar la agenda de la justicia económica y la crisis de los cuidados”, responde Batthyány.

Otro aspecto que aborda el podcast es qué pasa con los varones progresistas, que no lograron construir un legado distinto para las nuevas generaciones, y por qué razón cuesta que las agendas feministas entren en los espacios populares. Al respecto, Cacopardo señala: “Los varones jóvenes hoy están votando de un modo bastante mayoritario a las ultraderechas y ese fracaso está ligado a dos cuestiones. Por un lado, es difícil abandonar los lugares de privilegio y poder que han tenido históricamente. Por otro lado, me pregunto si hay pereza intelectual, porque si sos parte de un movimiento emancipador, no podés ignorar las construcciones teóricas y políticas de los feminismos como un movimiento emancipador de los más potentes. Entonces, hay que estudiar, hay que apropiarse de un conjunto de herramientas que nos han permitido develar la dominación y correr el velo de la desigualdad”.

Y añade: “La sensación es que los varones progresistas, lejos de apropiarse de estas herramientas y de mirar a los feminismos como parte de un bagaje fundamental para cualquier lucha de transformación social, miran para otro lado y algunos siguen pensando que es pianta votos. Cuando nos dicen que el retroceso en el voto de los varones jóvenes es culpa de los feminismos, en realidad es una manera de esconder el propio fracaso, es una manera de seguir refugiándose en los privilegios y de quizás excusarse por esta pereza intelectual”.

El 8M del internacionalismo antifascista es el último capítulo de Los monstruos andan sueltos, una producción que reflexiona sobre las condiciones sociales que fueron fermento de las ultraderechas y reúne las voces de intelectuales, periodistas, investigadoras y activistas de Argentina y la región como Esperanza Casullo, Rossana Reguillo, Martín Kohan, Claudia Albornoz, Pablo Seman, Veronica Gago, Daniel Feirstein, Natalia Aruguete, Victoria De Masi y Maristella Svampa


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