Los emprendimientos tecnológicos de estudiantes y graduados tienen su premio en la UNQ
Se lanza una novedosa convocatoria a la que podrán presentarse postulantes de todas las carreras presenciales y virtuales de la Universidad Nacional de Quilmes. Los premios serán de 600 mil pesos.
La Secretaria de Innovación y Transferencia Tecnológica de la Universidad Nacional de Quilmes otorgará cuatro premios de 600 mil pesos a emprendimientos de base tecnológica. Denominado “Premio a la Innovación Emergente”, la convocatoria de proyectos está abierta hasta el 30 de septiembre y está orientada a estudiantes y graduados de hasta tres años de todas las carreras presenciales y virtuales de la UNQ.
“El objetivo del premio es identificar proyectos en un estado muy embrionario que necesiten un acompañamiento de aceleración e incubación por parte de la Universidad. Entonces, queremos acompañar durante varios años a esos proyectos para que se transformen en empresas de base tecnológica o en proyectos de mayor envergadura”, señala Hernán Farina, secretario de Innovación y Transferencia Tecnológica de la Universidad Nacional de Quilmes, en diálogo con la Agencia de Noticias Científicas.
Las presentaciones podrán ser individuales o de hasta tres personas, siempre y cuando todas sean de la Universidad. Los trabajos serán evaluados por un comité de expertos y se tomarán en cuenta aspectos como que sean presentados de forma correcta, que tengan una propuesta clara, que tengan pertinencia tecnológica y que sean factibles de ser llevados a cabo.
Paso a paso
En la primera etapa se seleccionará un proyecto ganador por unidad académica (Departamento de Ciencia y Tecnología, Departamento de Economía y Administración, Departamento de Ciencias Sociales y Escuela Universitaria de Artes) y habrá menciones especiales para determinados proyectos considerados “valiosos”, aunque sin premio monetario.
Esos cuatro trabajos pasarán a la segunda etapa y el equipo de Innovación realizará con cada uno la tarea de acompañamiento y fortalecimiento por un período máximo de tres años, a través de asesoramiento en propiedad intelectual, modelo de negocios, escalado, acceso a financiamiento público y privado, infraestructura y equipamiento.
En este sentido, dos pasos claves que debe llevar adelante la Secretaría de Innovación son acelerar e incubar. Así lo explica Farina: “Acelerar es transformar un proceso de años en meses, porque gastar en estado embrionario es más barato que gastar en estados más de desarrollo donde un proyecto ya está maduro”. Por ejemplo, si se está desarrollando algo que no puede salir al mercado porque una agencia regulatoria no lo aprueba, la tarea de Farina y su equipo es reunir a las personas del organismo con las del proyecto para acelerar el proceso o bien para truncarlo y que no se invierta en él.
Por su parte, aunque la Real Academia Española lo defina como “cuidado de huevos para nazcan las crías de aves o con enfermedades incipientes”, el investigador destaca que incubar significa darle la infraestructura y la ingeniería financiera y económica a un proyecto para que se pueda llevar adelante.
Un vínculo necesario
La creación de nuevas tecnologías y emprendimientos siempre tiene implícita la pregunta del para qué y quiénes serán las personas o comunidades beneficiadas. Por eso, Farina asegura que es importante que la academia pueda estar en contacto permanente con las industrias que habitan el sur del conurbano bonaerense, brindando asistencia y soluciones a sus necesidades.
“El conurbano está inundado de industrias, pero no interaccionamos con ellas. Si necesitan soluciones tecnológicas no se las podemos brindar porque las desconocemos, no estamos en el barro del día a día industrial para conocer cuáles son esas necesidades”, reflexiona.
Por eso, el Premio a la Innovación Emergente está especialmente orientado a aquellas personas que “tienen proyectos innovadores para brindar soluciones al sector industrial o a la sociedad en su conjunto”. En esta línea, Farina resalta: “Queremos que esas cosas aparezcan. No vamos a dejar de aprobar un proyecto por no tener una solución tecnológica directa con el territorio, pero si la tiene, mucho mejor”.
