“Meal Prep”: ¿Cómo impacta la tendencia de planificar la alimentación en la salud y el bienestar?
Es una práctica gastronómica cada vez más popular que simplifica cocinar, promueve hábitos saludables y ahorra tiempo. La perspectiva de una experta en nutrición.
En medio de la vorágine diaria, donde las largas jornadas laborales y las múltiples responsabilidades parecen consumir cada minuto del día, la idea de mantener una alimentación saludable suele quedar relegada a un segundo plano. Sin embargo, las nuevas tendencias gastronómicas traen una estrategia revolucionaria: el “meal prep” o preparación de comidas, una práctica que simplifica la preparación de alimentos, promueve hábitos alimenticios más saludables y ahorra tiempo en la cocina.
¿Cómo funciona? El proceso es simple pero poderoso. Comienza con una planificación estratégica de la compra de ingredientes, priorizando alimentos frescos y saludables que estén en temporada y disponibles a precios accesibles. Esta primera etapa ayuda a optimizar el presupuesto y sienta las bases para una alimentación balanceada y variada.
Una vez que se tienen los ingredientes necesarios, es hora de poner manos a la obra con la organización. En ese sentido, hay que dedicar un tiempo después de la compra para lavar, secar y cortar las verduras, lo que permite tener a mano ingredientes frescos y listos para su consumo en cualquier momento de la semana. Este simple acto de preparación anticipada elimina la necesidad de destinar horas cada día a la elaboración de comidas.
Sabor en conserva
En cuanto a la cocina, esta técnica enseña a maximizar el tiempo y esfuerzo. “Al cocinar en cantidades mayores, es posible aprovechar al máximo los recursos y preparar varias porciones de una sola vez, que pueden ser guardadas para consumir en días posteriores o congeladas para su uso futuro, asegurándonos de tener siempre a mano opciones saludables y ricas”, dice a la Agencia de noticias científicas de la UNQ Mariángeles Espiño, especialista en Nutrición y Diabetes, jefa del Servicio de Nutrición del sanatorio Trinidad Quilmes.
Es importante destacar que la práctica de cocinar porciones adicionales no requiere un esfuerzo significativo. Simplemente significa aumentar ligeramente la cantidad de ingredientes utilizados durante la preparación de una comida y planificar con anticipación el almacenamiento adecuado de las sobras. Con la ayuda de técnicas de almacenamiento adecuadas, como el congelamiento o el envasado al vacío, las porciones adicionales pueden mantener su frescura y sabor durante un período prolongado, lo que las hace igualmente ricas en ocasiones subsiguientes.
En esa dirección, Espiño explica que el secreto del éxito en el meal prep radica en la planificación y la organización. “Al hacer una lista de nuestras comidas favoritas y elaborar un inventario de ingredientes, podemos diseñar un menú semanal que se adapte a nuestras necesidades y gustos. Con el tiempo y la práctica, podemos perfeccionar nuestras habilidades culinarias y crear preparaciones cada vez más nutritivas y sabrosas”.
Con todo, no se trata simplemente de seguir una dieta estricta o contar calorías, sino más bien de adoptar un enfoque holístico hacia la alimentación saludable. De esta manera, se cultiva una relación positiva con la comida y se aprende a disfrutar de alimentos nutritivos y deliciosos que puedan nutrir tanto física como emocionalmente.