Avanza la implantación de chips con distintos usos para seres humanos: ¿Cada vez más ciborg?
Desde chequeos cardiológicos hasta controlar prótesis con el cerebro, lo que parecían hechos aislados o de ciencia ficción, ahora se transforman en realidad.
Aunque hasta hace pocos años eran casos aislados o de ciencia ficción, los chips empiezan a ganar lugar en los seres humanos. Si bien la imaginación advertía aparatos grandes y por fuera del cuerpo (al estilo Robocop o Terminator, algo que se repitió en los primeros ciborgs del siglo XXI), en la actualidad son las tecnologías diminutas por dentro de la piel las que marcan el pulso de este fenómeno. Desde seguir el comportamiento del corazón en tiempo real hasta controlar un brazo robótico con el pensamiento, la salud está cada vez más mediada por la ciencia. En este sentido, son las empresas privadas las que llevan la delantera con los proyectos. De hecho, Neuralink apuesta a desarrollar interfaces cerebro-computadora y que una persona pueda diseñar un objeto o jugar un videojuego sin necesidad de mover el cuerpo. En este informe, la Agencia de Noticias Científicas de la Universidad Nacional de Quilmes repasa algunos de los principales avances.
Uno de los casos más conocidos fue el de Sergio Agüero, quien tuvo que dejar el fútbol profesional después de sufrir una arritmia durante un partido. En un stream, el ‘Kun’ contó que tenía un chip por debajo de la piel a la altura del pectoral izquierdo. En realidad, lo que el exfutbolista llevaba adentro era un aparato que registraba al instante el ritmo cardíaco y le permitía a los médicos tener un diagnóstico más preciso para realizar el tratamiento más adecuado.
En este sentido, el dispositivo transmite la información vía bluetooth o comunicación inalámbrica con el celular del paciente, quien a su vez lo reenvía a su médico. De hecho, durante la final del mundial de Qatar 2022, el propio Agüero relató que su cardiólogo –a miles de kilómetros de distancia– le recomendó tranquilizarse luego de advertir una suba en sus pulsaciones.
Neuralink, una de las empresas de Elon Musk, desarrolló un implante cerebral que le permite a la persona manejar un brazo robótico con sus pensamientos, sin la necesidad de ningún aparato externo. “Si tiene una capacidad limitada o nula para usar ambas manos debido a una lesión de la médula espinal cervical o esclerosis lateral amiotrófica (ELA), puede calificar para el estudio PRIME”, afirman en su página web.
La empresa del magnate recibió la aprobación de Estados Unidos y de Canadá para comenzar los ensayos clínicos. “Este es un primer paso importante para restablecer no solo la libertad digital, sino también la libertad física”, afirmaron a través de su página web y redes sociales”, resaltaron a través de X.
Como si fuera poco, Neuralink ya realiza pruebas para que personas con lesiones en la médula espinal cervical o ELA puedan controlar distintas aplicaciones de la computadora o el celular con el pensamiento. El estudio consiste en colocar un pequeño implante en una parte del cerebro que planifica los movimientos y el dispositivo está diseñado para interpretar la actividad neuronal del paciente.
Hasta el momento se realizaron dos pruebas y uno de los pacientes incluso pudo jugar a un videojuego de tiros para el cual, en condiciones tradicionales, necesitaría de las dos manos. Sin embargo, pudo controlar la mayoría de las acciones mediante su pensamiento.
Sin embargo, esta tecnología ya lleva algunos años. En 2018, Suecia fue noticia porque miles de personas se implantaron un chip en la mano que les permitía desbloquear puertas y hasta pagar sin necesidad de usar tarjeta o efectivo, ya que los datos de su cuenta bancaria estaban en ese aparato.
Incluso, en el boom de la tecnología, algunas empresas aprovechan para publicitar productos que prometen ser efectivos pero que no cuentan con aprobación gubernamental. Este fue el caso del “chip sexual”, un dispositivo que liberaba testosterona y prometía aumentar la energía en sus usuarios. Por ejemplo, personajes como Sergio Goycochea, Carmen Barbieri y Catherine Fullop fueron algunos encargados de divulgarlo. Ahora bien, los especialistas cuestionaron la eficacia del equipo que ni siquiera tuvo el visto bueno de la Anmat.
Según la Real Academia Española, los ciborg son aquellos que están formados por materia viva y dispositivos electrónicos. Lejos de las grandes maquinarias propias de películas de superhéroes, los dispositivos casi invisibles son los que dominan en la realidad y obligan a realizar nuevas preguntas sobre los límites físicos y éticos de la ciencia y la tecnología vinculada a la salud. ¿Habrá cada vez más ciborg o habrá que formular una nueva noción de lo que puede un ser humano?