La UNQ participó del III Foro Mundial de Derechos Humanos que se realiza en Argentina
Lo hizo a través del Centro de DDHH Emilio Mignone en una actividad llevada a cabo en la Facultad de Arquitectura de la UBA.
Del 20 al 24 se desarrolla en el país el III Foro Mundial de Derechos humanos 2023 (FMDH23) organizado por la Unesco. El encuentro es un espacio de debate público que congrega a activistas y líderes de todo el mundo. Para esta ocasión presenta más de mil actividades que se llevan a cabo en cuatro sedes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, entre las que se destacan la reunión del Grupo de Puebla (con la presencia de Cristina Fernández de Kirchner, Evo Morales, Rafael Correa y Baltasar Garzón) y la proyección de la película Seremos Millones, que aborda el golpe de Estado y la recuperación democrática en Bolivia. El Centro de DDHH Emilio Mignone de la Universidad Nacional de Quilmes fue parte del evento en el panel denominado ‘La radio, en clave de derechos’.
Promovida por la Red Interuniversitaria de Derechos Humanos (RIDDHH), la actividad fue una iniciativa de la UNQ a través del Centro, junto con las Universidades Nacionales de Santiago del Estero, General Sarmiento y las participaciones de Rosario y Avellaneda.
“La RIDDHH trabaja el aspecto comunicacional de los derechos humanos a través de producciones en formato radiofónico para difundir el conocimiento y los saberes que se producen en las universidades y concientizar sobre distintas problemáticas”, cuenta Dana Rodríguez, representante del Centro y docente universitaria, en diálogo con la Agencia de Noticias Científicas de la UNQ.
En este sentido, Rodríguez señala que la radio tiene más de 100 años y es parte del derecho a la información. “A través de la radio no solo hay un acercamiento con otros derechos sino que además se garantiza que los saberes y conocimientos en ámbitos académicos, lleguen a la sociedad”, detalla.
La democracia como prisma
La realización del III Foro coincide con la celebración de los 40 años de democracia ininterrumpida a partir de su recuperación en 1983. Más allá de los avances valiosos y las conquistas de diferentes derechos, el concepto se amplió y no solo se circunscribe al campo civil y político.
Además de la reflexión y los análisis que se realizan habitualmente, el evento fomenta redes de activistas que permiten no solo compartir las problemáticas y la coyuntura actual, sino las experiencias de acciones en este contexto. Por eso, hay temáticas relacionadas a los derechos humanos (memoria, verdad y justicia; negacionismo; derecho a la paz), derechos ambientales (cambio climático y desarrollo sostenible), sociales (discursos de odio; discriminación; racismo), políticos (lawfare y violencia institucional) y económicos (deuda externa, y empresas).
“Que el III Foro Mundial de Derechos Humanos se realice en Argentina y en el marco de los 40 años de democracia interrumpida pone de relieve no solo los derechos ampliados en este lapso, sino el compromiso continuo, la lucha y la militancia como lo hacen históricamente las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo”, destaca Rodríguez, coordinadora del proyecto de extensión universitaria “Universidad por la Identidad”.
En defensa de los DDHH
Emilio Mignone fue abogado y educador argentino, fundador de la Universidad Nacional de Luján y la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU). Sin embargo, su nombre se volvió sinónimo de derechos humanos a partir del 24 de marzo de 1976. Cuando los militares irrumpieron en la oficina de la Universidad ese día, Mignone les dijo: “No es necesario ese despliegue ridículo de fuerza cuando todo el mundo sabe que las únicas armas aquí son máquinas de escribir, libros y equipos de laboratorio”.
Plantarse de frente a la dictadura le valió la desaparición de su hija, de la cual aún se desconoce su destino. A partir de allí, se transformó en uno de los líderes del movimiento de derechos humanos que denunció en Argentina y el extranjero los crímenes del terrorismo de Estado. Con su palabra y su acción contribuyó a juzgar a los responsables y creó, junto con otros familiares, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).
Los inicios del Centro fueron en el marco de una investigación dirigida por el propio Mignone en 1994 sobre el rol que jugó la iglesia Católica de Quilmes durante el gobierno de facto (de hecho publicó un libro titulado Iglesia y dictadura). Tras su muerte en 1998, un año después se fundó el Centro de Derechos Humanos Emilio Mignone (CeDHEM) en la UNQ, que trabaja desde entonces en la formación, la investigación y la extensión universitaria.
En la actualidad, el Centro está integrado por el director Rodolfo Brardinelli, Néstor Manchini, Matías Penhos, Omar Suárez, Luciana Sánchez, Dana Carboni y Dana Rodríguez.
