Hacer frente a la crisis: el gobierno bonaerense anunció la compra de cuatro mil latas de Supersopa de la UNQ

Con más del 50 por ciento de la población en la pobreza, la universidad pública entregará el equivalente a 75 mil porciones en barrios populares en una primera etapa.

El Programa Supersopa funciona en la Universidad Nacional de Quilmes desde 2002. Créditos: Supersopa.
Créditos: Supersopa.

El gobierno de la Provincia de Buenos Aires anunció la compra a la Universidad Nacional de Quilmes de cuatro mil latas de Supersopa hasta fin de año. Durante la firma del convenio, se entregaron las primeras 1.500 latas, equivalentes a 75 mil porciones de sopa. El producto insignia de esta casa de estudios, que consiste en una sopa altamente nutritiva, será destinada a más de treinta barrios populares. La universidad pública ofrece respuestas en un contexto signado por un 52 por ciento de la población en la pobreza, el 18 por ciento en la indigencia (según datos de la UCA) y la demanda de los comedores comunitarios al gobierno nacional por la entrega de alimentos para sobrevivir. El anuncio estuvo acompañado de un recorrido por la Planta Elaboradora de Alimentos Supersopa y contó con la presencia del ministro de Gobierno de la provincia Carlos Bianco, la titular del Organismo Provincial de Integración Social y Urbana Romina Barrios, el rector de la UNQ Alfredo Alfonso y la directora de la planta Anahí Cuellas.

“Los índices de pobreza y de indigencia son muy altos, a la vez que, según Unicef, más de un millón de pibes y pibas se van a dormir sin comer. En ese contexto, en el que el gobierno nacional desertó de sus obligaciones como Estado, la provincia de Buenos Aires da respuestas a través del Servicio Alimentario Escolar (que garantiza la nutrición de estudiantes que asisten a escuelas públicas provinciales), del programa MESA (se trata de la entrega de un módulo alimentario mensual) y ahora también con la iniciativa de repartir Supersopa a distintos barrios de la provincia”, explica Bianco a la Agencia de Noticias Científicas de la UNQ.

Por su parte, el rector Alfonso enfatiza ante este medio: “La adquisición de las cuatro mil latas de Supersopa por parte del Estado provincial es muy importante por la valoración que se le da a nuestro producto y por la necesidad que existe“. Y agrega que se espera multiplicar la producción para 2025 puesto que, debido a la situación que atraviesa el país, “la Supersopa y otras de las elaboraciones desarrolladas por nuestras ingenieras e ingenieros serán cada vez más necesarias”.

(De izq. a der.): Romina Barrios, Alfredo Alfonso, Carlos Bianco y Anahí Cuellas. Créditos: Agencia de Noticias Científicas de la UNQ.
(De izq. a der.): Romina Barrios, Alfredo Alfonso, Carlos Bianco y Anahí Cuellas. Créditos: Agencia de Noticias Científicas de la UNQ.

Las latas de alimentos se entregarán en tres instancias y serán destinadas a más de 300 espacios comunitarios de los municipios de San Martín, Morón, La Matanza, Berazategui, Florencio Varela, Quilmes, Lanús, San Vicente, Ensenada, Berisso y La Plata. La titular del Organismo Provincial de Integración Social y Urbana, Barrios, apunta ante la Agencia: “Frente al contexto de emergencia, necesitamos un Estado activo con una mirada solidaria y amorosa que articule entre la provincia, los intendentes y las universidades. Es una iniciativa que irá escalando para cubrir las necesidades alimentarias de toda la provincia“.

La Universidad al servicio de la comunidad

Desde 2002, estudiantes, docentes y graduados elaboran una sopa concentrada de alta calidad y bajo costo compuesta por hortalizas, carne, arroz y arvejas en proporciones adecuadas sin conservantes ni aditivos. Los destinatarios de esta comida son comedores comunitarios y escolares de distintas partes del país y puntos internacionales, como África o zonas de conflicto. También, la planta elabora guisos de arroz, locro y sopa de vegetales.

La directora de la planta elaboradora, Cuellas, afirma a la Agencia que la compra de Supersopa por parte de la Provincia asegura la continuidad y el fortalecimiento de los pilares académicos, productivos y sociales que sostienen el programa, a la vez que representa un paso hacia una salida colectiva y solidaria ante la emergencia alimentaria que nos atraviesa.

“El Programa Supersopa se sostiene gracias al firme compromiso académico, económico y social de nuestra universidad frente a la crisis económica y alimentaria que atravesamos, pero sin la compra y distribución de nuestros productos a quienes más lo necesitan, el objetivo y la continuidad del programa estarían en riesgo“, detalla.

El alimento se almacena en latas con una capacidad de 4 litros. Los envases se encuentran en condiciones de esterilidad comercial, es decir, los microorganismos no afectan al alimento ni al consumidor final, por lo que la sopa se puede conservar hasta por un período de dos años. De cada lata pueden obtenerse hasta 50 porciones, es decir cincuenta personas alimentadas, y las de locro y guiso rinden 24 porciones.

Aún hay más: el programa también brinda asesoramiento para la transferencia tecnológica de la planta a quienes deseen replicar el programa en diversos puntos del país.

Un gobierno que mira para otro lado

El Programa Supersopa es producto de la ciencia, la tecnología y la educación universitaria, tres pilares que no son parte de la prioridad del gobierno nacional. En este sentido, el ministro de Gobierno bonaerense afirma: “Hay plata pero el problema es que el presidente la destina a otras cosas, incluso, lo ratificó en el discurso por el presupuesto que dio recientemente. Fue muy perverso al decir que, aunque le sobre la plata, no la iba a destinar ni para políticas sociales, ni para ciencia ni tecnología. Según lo que dijo, todo peso que sobrará se iba a transformar en dólares para pagar el endeudamiento externo”.

Así, gran parte del personal del Conicet contratado entre diciembre y marzo fue despedido, las becas doctorales y postdoctorales no se renovaron, y los salarios de científicos, docentes y nodocentes universitarios quedaron muy por detrás de la inflación. Bianco agrega: “El presidente fue muy claro en ese sentido. Venimos y vamos hacia un ajuste permanente de la economía nacional, la ciencia, la tecnología y las universidades”.


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Luciana Mazzini Puga

Licenciada en Comunicación Social (UNQ).