Reflexión y acción: una mirada desde Argentina para abordar la Patria Grande
Del 8 al 10 de junio se realizará el primer Congreso del Pensamiento Nacional Latinoamericano en la Universidad Nacional de Lanús.
El 8, 9 y 10 de junio se llevará a cabo en la Universidad Nacional de Lanús (UNLa) el primer Congreso del Pensamiento Nacional Latinoamericano. El mismo es impulsado por el Foro del Pensamiento Nacional Latinoamericano, organización creada a fines de 2022 en la cual participan más de 60 agrupaciones, instituciones y redes. El objetivo del encuentro es reunir a los distintos espacios que observan la realidad de América Latina de forma similar para realizar un diagnóstico de la situación actual y, además del debate, generar propuestas concretas para el diseño de políticas públicas que posibiliten un desarrollo social y económico soberano, inclusivo y sustentable. El Congreso contará con conferencias y paneles, mesas temáticas y talleres participativos.
En diálogo con la Agencia de Noticias Científicas de la UNQ, Mara Espasande, directora del Centro de Estudios de Integración Latinoamericana “Manuel Ugarte” de la UNLa, analiza: “Lo que observamos es que dentro del mundo académico y dentro del mundo del pensamiento en Argentina estamos muy dispersos aquellos que adherimos a cierta matriz de pensamiento popular y nacional latinoamericano”.
Por este motivo, en un contexto signado por la ilusión de retomar algunas consignas que quedaron enterradas y podrían revivir con fuerza a partir de la cantidad de gobiernos progresistas en la región y la decisión de avanzar como bloque, el Congreso y el Foro se transforman en una necesidad.
Sin embargo, la unión en torno al Foro no significa que todos los espacios que allí confluyen sean iguales. En este sentido, Espasande destaca que, más allá de los matices y la diversidad de miradas en torno a las problemáticas centrales que afectan a Argentina y América Latina, “compartimos algunas claves para leer la realidad presente y pasada”.
Una combinación necesaria
Si bien tienen nuevos matices y nuevas modalidades, los problemas que aquejan a América Latina y el Caribe no son de ahora, sino que tienen al menos 200 años. Aunque los contextos van cambiando, las grandes problemáticas regionales que todavía no se zanjaron vienen del siglo XIX.
“A partir de la fragmentación de Latinoamérica producto de la emancipación, una serie de cuestiones vinculadas con el ejercicio de la soberanía en todos los campos de la vida nacional quedaron sin resolver”, sentencia Espasande, especialista en pensamiento nacional y latinoamericano.
Por eso, las obras de los grandes pensadores de los siglos XIX y XX respecto a la Patria Grande continúan vigentes. Aggiornar sus conceptos y trabajarlos desde el siglo XXI es otro de los propósitos del Foro.
Lo nacional es lo latinoamericano
En términos académicos, el pensamiento nacional suele estar vinculado a lo argentino y el pensamiento latinoamericano arraigado a la geografía que compete desde el río Bravo (norte de México) hacia el sur. Aunque parece algo obvio, desde el Foro tensionan esta distinción y llaman a pensar a través una mirada más amplia.
“Consideramos que los grandes problemas de nuestro país tenemos que pensarlos en términos regionales porque lo nacional ya no es lo argentino sino lo latinoamericano”, afirma Espasande. En este sentido, continúan con la mirada de Manuel Ugarte (pensador argentino que teorizó sobre la región a principios del siglo XX), quien hablaba de una nacionalidad superior –la latinoamericana– y luego la existencia de diversas nacionalidades de patria chica conformadas en la segunda mitad del siglo XIX.
Al respecto, Espasande cuenta que Ugarte planteaba la necesidad de la unidad de América Latina como nación para hacer frente al expansionismo norteamericano. “Él planteaba que la Argentina había nacido como consecuencia de la disolución de una nación superior (América Latina) y que era una misión de los hombres y mujeres del siglo XX poder reconstruirla ya que compartimos los mismos problemas, características culturales e históricas”, sentencia la investigadora.
