Lanzan un ciclo de videos sobre la desigualdad de género en las ciencias sociales en América Latina
Los equipos de La cocina de la investigación y Mujeres & Academia ponen el foco en la invisibilización y disparidad que viven a la hora de hacer ciencia en Chile, Argentina, Brasil y México.
El proyecto “La cocina de la investigación”, perteneciente a la Universidad Nacional de San Martín, lanzó un ciclo de producciones audiovisuales sobre las desigualdades y violencias de género que viven las mujeres académicas en el ámbito de las ciencias sociales. Los videos se basan en los resultados de una investigación llevada adelante por el grupo Mujeres & Academia (Chile) que indaga esta problemática en distintos países de América Latina. El ciclo comienza con la situación que viven las investigadoras en las instituciones del país trasandino y continuará con otras producciones audiovisuales sobre Argentina, México y Brasil. “Las universidades latinoamericanas tienen gran capacidad para juzgar a la sociedad y muy poca para juzgarse a ellas mismas. Creo que una parte de nosotras oculta o minimiza las violencias que vivimos acá adentro”, dice una voz en off en el primer video que da inicio a la serie.
El ciclo se desprende de los resultados del proyecto “Mujeres en la academia: desigualdades y violencias de género en las ciencias sociales de Chile, Argentina, Brasil y México”, dirigido por Mujeres & Academia. Desde La cocina de la investigación, sitio web argentino que explora y divulga los procesos de investigación en las ciencias sociales y que llevan adelante los cortos, pretenden que estas producciones funcionen como “una herramienta de sensibilización sobre una problemática tan extendida como invisibilizada” y se espera que puedan convertirse en un insumo para promover cambios institucionales en pos de la equidad de género en las universidades y centros de investigación de la región.
De esta manera, las producciones cuentan con más de cincuenta testimonios en primera persona y material de archivo e invitan a reflexionar sobre las barreras y desafíos que enfrentan las mujeres en el ámbito académico. “Como estudiantes que transitamos una formación académica atravesada por el feminismo, siempre procuramos mantener una mirada crítica y atenta a las desigualdades de género en nuestros espacios de aprendizaje. Una de las cosas que observamos es que por los roles de género tradicionales, las docentes mujeres suelen estar mucho más dispuestas que sus colegas varones a socializar consejos y experiencias en investigación con quienes recién comienzan“, describen desde el equipo de La cocina a la Agencia de Noticias Científicas de la UNQ.
Y continúan: “Este trabajo, que puede considerarse un tipo de cuidado en el ámbito académico, es clave para la formación de nuevas generaciones de investigadores e investigadoras, pero es también una de las tareas menos valoradas y reconocidas en la academia, en comparación con actividades como la publicación de artículos. Estas desigualdades, profundamente arraigadas, nos preocupan porque no solo afectan a quienes viven estas experiencias, sino que también perpetúan inequidades estructurales en el campo de las ciencias sociales“.
Además, según detallan desde Mujeres & Academia, ellas son mayoría en las carreras universitarias y maestrías y son casi la mitad de quienes cursan doctorados en el mundo. “No obstante, suman solo un tercio de los y las trabajadores de investigación y docencia universitaria: la ventaja educacional femenina no se traduce en acceso igualitario al mercado laboral en general, y menos al de la ciencia”, explican.
Así, la investigación de origen compara las experiencias de las investigadoras y profesoras de las ciencias sociales en instituciones científicas y de educación universitaria de Chile, Argentina, Brasil y México. El objetivo, según dicta el proyecto, es comprender las desventajas económicas, jerárquico-institucionales, políticas, la reproducción de estereotipos, simbolismos y moralidades patriarcales que marginan a las mujeres académicas. Además, analizan las estrategias personales y comunitarias que realizan para dar respuesta a estas problemáticas.
El equipo de La cocina proyecta que estos cortos inviten a nuevos debates sobre temas como las desigualdades de género en la academia. “Todavía no se habla lo suficiente. Las desigualdades y violencias de género atraviesan diversos ámbitos de la sociedad, pero nos parece importante pensar cómo esta problemática incide particularmente en la academia porque es la institución que se ocupa de producir conocimiento sobre y para la sociedad“, afirman.